El diseño de mundo abierto se ha vuelto bastante omnipresente en el panorama actual de los videojuegos; como muestra de ello, considera que incluso ahora tenemos un juego de Sonic de mundo abierto. Muchos títulos han adoptado (o forzado) este diseño con resultados variados, pero encontrar un desarrollador que lo haya hecho con tanto estilo como FromSoftware sería difícil.

Reconociendo haberse inspirado considerablemente en algunos aspectos de Zelda: Breath of the Wild, FromSoftware logró adaptar con éxito su aclamado RPG de acción a un mundo abierto expansivo y espectacularmente grande. El mayor logro de este radical cambio fue que The Lands Between se sintió cohesivo y centrado a pesar de su inmensidad, ofreciendo un flujo constante de secretos, sorpresas y desafíos a lo largo de cientos de horas de juego. Además, esa misma ominosa atmósfera y característica dificultad impregnó cada aspecto de la experiencia, convirtiendo a Elden Ring en una obra maestra de diseño y ejecución a los ojos de muchos.

Bueno, han pasado dos años desde el lanzamiento de Elden Ring, pero su primer DLC, Shadow of the Erdtree, demuestra que FromSoftware no desperdició ese tiempo.

Exploré The Lands Between durante más de cien horas, y para poner esta review en perspectiva, me encontraba más allá del nivel 160 después de completar el juego base y al inicio de un New Game+. Esto es relevante, ya que si estás en una situación similar y ansías jugar el DLC, sí que enfrentarás retos.

FromSoftware siempre ha establecido requisitos de entrada algo peculiares para sus DLC, y Elden Ring no es una excepción. Para acceder al Shadow Realm y disfrutar de su nuevo capítulo, primero debes derrotar a dos jefes opcionales del juego principal: Radahn Starscourge y Mohg, Lord of Blood. Me tomó unas seis horas desde el inicio del juego, aprovechando algunos atajos y con un personaje bien equipado que facilitó las cosas. Esta exigencia tiene sentido en el contexto más amplio, ya que ambos jefes son fundamentales para la historia de Shadow of the Erdtree.

Una vez completados los requisitos, puedes adentrarte en el Shadow Realm, y la primera impresión visual de esta completamente nueva área es tan impactante como salir por primera vez de la Cave of Knowledge de Elden Ring. Situado en la base del dorado Erdtree, el Reino de las Sombras (Shadow Realm) es una verdadera delicia visual. Al entrar en esta marcada y aterradora tierra te encontrarás en una vasta y abierta llanura fantasmal, con imponentes estructuras en el cielo y varios puntos a lo lejos que invitan a la exploración. Una característica distintiva del diseño de Elden Ring es su relativamente minimalista guía, que te anima a seguir adelante impulsado por la curiosidad y la valentía mientras vas ensamblando las piezas; en ese sentido, si ves algo intrigante a lo lejos, es probable que puedas llegar hasta allí y ser generosamente recompensado (o encontrar tu perdición a manos de lo que encuentres). Ese sentido familiar de temor y maravilla, tan característico de la experiencia de FromSoftware, está presente en cada esquina, demostrando ser más que suficiente para alejarte constantemente del camino trillado.

La historia de Shadow of the Erdtree (al menos para mí) es tan opaca como cualquier otro título del desarrollador, pero para los puristas del lore, habrá mucho para que continuen hilando el universo. La trama principal te lleva a seguir la pista de Miquella, y desde el principio conocerás a algunos devotos (algo amistosos) igualmente interesados en el destino de su maestro y la razón de su exilio al desgarrado Reino de las Sombras. La forma en que Mohg y Radahn se entrelazan con la búsqueda general de Miquella es interesante, aunque a menudo estuve más concentrado en evitar las palizas como para apreciar algunos de los detalles más sutiles de la trama. Siempre he disfrutado más permitiendo que un juego de FromSoftware me seduzca por completo con su gótica atmósfera, y tal vez sea culpable de no leer lo suficiente las descripciones de los objetos. Sin embargo, para aquellos que desean una inmersión profunda, esta nueva historia ofrece una gran cantidad de sutiles detalles y referencias a personajes del juego principal que seguramente permitirán que el lore crezca muchísimo más.

En cuanto a la jugabilidad en sí, no ha cambiado mucho en términos fundamentales. No obstante, hay una gran cantidad de nuevos ítems, armas, armaduras, Spirit Ashes y hechizos adicionales para ampliar el arsenal de tu personaje. Confieso que uso descaradamente un build con armadura pesada y Katana en todo el camino, y como tal, me alegré de descubrir varios encnatamientos ofensivos. Uno de ellos, especialmente desagradable, implicaba convocar una ola de putrefacción escarlata acompañada de un enjambre de mariposas rosadas, mientras que otra me permitía rodar con espinas brotando de mi espalda. Se presenta también una amplia variedad de nuevas armas y armaduras para obtener de jefes y enemigos comunes, además las nuevas opciones para equipar a tu personaje, que expanden el ya impresionante arsenal del juego base, parecen ser casi infinitas.

Un ajuste en el gameplay, que sí tiene un impacto significativo, es la introducción de un sistema de progresión paralelo que solo está operativo dentro del Reino de las Sombras. Esparcidos por el lugar encontrarás Scadutree Fragments y Revered Spirit Ashes, que aplican mejoras significativas al ataque y la defensa de tu personaje y de las invocaciones de tus Spirit Ashes, respectivamente. Estos son esenciales para sobrevivir en el Reino de las Sombras, porque incluso si estás en un nivel alto y tienes una serie de armas +10, Shadow of the Erdtree probablemente te humillará en algún momento.

No debería sorprender que este DLC presente una dificultad ocasionalmente brutal, especialmente si lo estás enfrentando en un New Game+ como yo. Siempre he disfrutado del desafío excepcionalmente equilibrado de un juego de FromSoftware, y la mayoría de los jefes más problemáticos tienen ese aspecto de difícil pero justo. Espero que este conocimiento te ayude a resistir la tentación de lanzar tu control por los aires. Sin embargo, debo decir que la dificultad puede ser bastante desigual entre los jefes. Derroté fácilmente a varios jefes y mini-jefes en el primer intento (aunque uno o dos me dieron reto), pero el jefe final sin duda será un punto de discordia del tamaño de Malenia para muchos jugadores. No voy a revelar la naturaleza de esta pelea de múltiples fases, pero es, con mucho, el encuentro más brutal que he experimentado en un título de FromSoftware (esto incluye Isshin de Sekiro).

Una faceta con la que no quedé tan encantado, pero que la entiendo, fue la exploración en secciones donde la verticalidad es prominente. Hay una sección intermedia confusa donde es obvio que debes avanzar gradualmente hacia abajo, pero no siempre está claro cómo llegar allí exactamente. Esto se evidencia por la abundancia de manchas de sangre familiares en los bordes de acantilados traicioneros, simbolizando la confusión y frustración compartidas de los jugadores que intentan encontrar su camino hacia la parte inferior del área antes del lanzamiento del juego. Algunas secciones interiores también son un poco más pequeñas de lo que su arquitectura sugeriría y son decepcionantemente breves, pero esta es una queja menor dada la cantidad de áreas distintas para explorar.

Shadow of the Erdtree ofrece a todos los masoquistas de Elden Ring exactamente lo que quieren: una historia solemne y grandiosa que es más de lo que parece y una nueva tierra magnífica para explorar con una cantidad ridícula de recovecos en los que perderse y/o morir. Si pensabas que FromSoftware estaba quedándose sin nuevas formas de torturarte, deja que Shadow of the Erdtree te convenza de lo contrario. Este DLC es tan expansivo en tamaño y alcance como algunos juegos completos, y representa el trabajo de un estudio que siempre está en su prime y que muestra poco signo de desaceleración en el futuro cercano.

gamecored score 10

Esta review fue escrita luego de jugar una copia digital de Elden Ring: Shadow of the Erdtree para PlayStation 5 brindada por Bandai Namco.

PUNTOS BUENOS

Es más Elden Ring. El diseño visual y la ejecución son magistrales, el Reino de las Sombras te cautiva inmediatamente. Una cornucopia de nuevas armas, armaduras, hechizos, invocaciones y Sprit Ashes para mezclar y combinar. Una enorme cantidad de contenido para un DLC.

PUNTOS MALOS

Me cuesta mucho pensar en alguno.

CONCLUSIÓN

El DLC Shadow of the Erdtree es Elden Ring en su forma más refinada, con algunas de las batallas de jefes más emocionantes de todo el catálogo de FromSoftware. El resultado es un DLC que termina siendo una obra maestra con el tamaño de un juego completo, manteniendo a los jugadores cautivados durante horas, con su nuevo mapa albergando una atractiva narrativa impulsada por los personajes, una colección diversa de tesoros y numerosos secretos por descubrir.