The Legend of Heroes: Trails into Reverie

The Legend of Heroes: Trails into Reverie es la entrega más reciente de la franquicia The Legend of Heroes lanzada en occidente. Cronológicamente hablando, se trata del undécimo título de lo que los fans conocen como la saga “Trails” el cual fue lanzado primero en Japón el 27 de agosto de 2020 y que, gracias a Nis America, por fin podrá ser jugado por los usuarios de esta parte del mundo y con una localización al inglés.

Si bien Trails of Cold Steel IV supuso el final del arco de Erebonia y de una gran parte de la historia que se ha contado a través de 10 videojuegos, Trails into Reverie sirve como una suerte de epílogo para las historias de Rean Schwarzer y Lloyd Bannings, pero también como el prólogo perfecto para el siguiente arco y, sobre todo, para el “endgame” de esta masiva saga de JRPGs.

¿Es un cierre satisfactorio a casi dos décadas de extraordinarios videojuegos de rol o simplemente es más de lo mismo? Eso te explicaremos a continuación en este análisis de The Legend of Heroes: Trails into Reverie.

Tres protagonistas, un destino en común

A diferencia de los anteriores títulos de la saga, Trails into Reverie cuenta con tres protagonistas y cada uno tiene su propia ruta que contribuye a la historia. Debido a que la calidad de cada una varía, es mejor explicarlas por separado y luego calificar su ejecución en conjunto en las últimas etapas de la campaña.

El juego inicia con Lloyd Bannings, el héroe de Trails from Zero y Trails to Zero, y su interminable misión por liberar Crossbell. Cuando parecía que el Estado finalmente lograría obtener su independencia tras los eventos de Trails of Cold Steel IV, el villano Rufus Albarea reaparece con su nuevo séquito y vuelve a apoderarse del territorio tras vencer a todos los que se le oponían. Será tarea de Lloyd, la Special Support Section (SSS) y el resto de sus aliados recuperar su hogar una vez más.

Pese a que esta ruta cuenta con algunos de los personajes más entrañables de toda la franquicia como Wazy, Rixia o Noel y hasta se anima a darle una resolución satisfactoria a algunos que aún no la tuvieron, es bastante claro que se trata de la más débil de las tres. Esto se debe a que dichos eventos ya fueron narrados en Trails to Azure, por lo que aquí se sienten como un reciclaje de los momentos cumbre de la historia de dicho videojuego, pero menos inspirados y con una ejecución más pobre.

Además, el motor de estos eventos es la maldición de Erebonia, el plot device que Cold Steel III y IV usaron para desarrollar sus narrativas y para justificar el inconsistente accionar de varios personajes. Esto provoca que muchos eventos nos dejen con una sensación de insatisfacción y algunos tramos resultan aburridos porque los que jugamos Trails into Azure hasta podemos prever lo que sucederá a continuación.

Curiosamente, la historia de Rean Schwarzer -protagonista de Trails of Cold Steel- resulta más interesante ya que soluciona los mayores problemas de su arco: la ejecución y ritmo de la trama. Si bien se retienen varios elementos que convirtieron a esta parte de la historia en algo tan controversial dentro del fandom, lo cierto es que lo hace con más cautela y sin extenderse demasiado.

El conflicto interno de Rean mientras se enfrenta con un misterioso enemigo con el que tiene una conexión personal está muy bien logrado y logra mantener el interés del jugador. Los interesantes personajes que forman este grupo n. Todo con el objetivo de lograr un pacing más adecuado.

RELACIONADO: THE LEGEND OF HEROES: TRAILS INTO REVERIE ESTRENA NUEVO TRAILER DE GAMEPLAY

Pero, sin lugar a dudas, la joya de la corona es la ruta de ‘C’. Este enigmático personaje cuya identidad no revelaremos para evitar spoilers, es acompañado por tres nuevos personajes: Lapis Rosenberg, Swin Abel y Nadia Reine. La pequeña muñeca y la pareja de jóvenes asesinos no solo son personajes bien escritos, sino que además dotan a este peculiar grupo de una sinergia y carisma al mismo nivel o incluso mayor que los héroes de anteriores arcos.

Un detalle a considerar es que la ruta de ‘C’ fue escrita por guionistas que en aquel momento comenzaron a trabajar en Nihon Falcom. Es probable que este sea el motivo por el que el ritmo de la historia está bien estructurado y los temas van acorde a la temática ligeramente más oscura que envuelve a este grupo de “antihéroes”. Esta línea argumental se siente fresca y tiene varios momentos memorables que recuerdan mucho a las primeras aventuras en Liberl, Crossbell y Erebonia.

El final de una historia y el inicio de otra

Como mencionamos, este título tiene 3 rutas distintas por las que el jugador debe atravesar progresivamente, ya que solo se puede avanzar hasta cierto punto antes de que el camino se bloquee y se deba cambiar a los otros. Es posible cambiar en cualquier momento con la mecánica Trails to Walk pulsando el botón correspondiente pero, llega un punto en el que todas las rutas convergen para el gran acto final.

En general, la historia de Trails into Reverie se siente como un buen logro por parte de Nihon Falcom tras los tibios resultados de Cold Steel IV. Aunque la ruta de Lloyd es muy similar a Trails to Azure, es un satisfactorio cierre para el arco de Crossbell y hasta impulsa el desarrollo de varios personajes como Randy, Wazy, Tio y, por supuesto, Lloyd.

Hubiese sido ideal que un nuevo conflicto se plantee para estos héroes en lugar de volver a explotar la independencia de su hogar, pero cuando incluso se se le suma la presencia de la maldición de Erebonia, el impacto de las acciones de villanos y personajes secundarios pierde fuerza y cuesta tomarlos como una auténtica amenaza. Por desgracia, estos fallos se extienden a la historia general y, si bien es mejor que Trails of Cold Steel IV, no alcanza a los mejores títulos de la saga como Trails in the Sky SC y The 3rd, Trails to Azure o Trails of Cold Steel III.

Aunque la historia flaquee en ciertas partes, los que no fallan en la ecuación son los personajes. La saga Trails cuenta con algunas de las personalidades mejor escritas del género y Trails into Reverie solo los mejora. Para empezar, se nota el crecimiento en Rean Schwarzer y su grupo ya que son más competentes al resolver las situaciones por las que atraviesan. La vieja y nueva Clase VII incluyen a demasiados personajes como para que todos puedan brillar con la misma intensidad, pero ahora funcionan como una unidad de temer y es reconocida como tal por todos.

Lo mismo aplica para Lloyd Bannings y la SSS. La resolución de sus arcos personales tras tantas entregas es conmovedora y logran desarrollarse aún más aprovechando el nuevo conflicto por el que atraviesan (pese a que técnicamente ya lo hicieron en el pasado…). Finalmente, el grupo de ‘C’ es sin lugar a dudas el más interesante y los misteriosos trasfondos de sus integrantes, así como también sus personalidades y carisma innato lo convierte en grupo con una química sin igual que, por fortuna, se une al ya inmenso elenco de personajes de Trails.

Por fortuna, Trails into Reverie no solo finaliza la primera mitad de la saga, sino que además sienta las bases para el siguiente arco gracias a una sección de la que hablaremos más adelante.

Uno de los combates por turnos más impresionantes del RPG

El núcleo del gameplay de Trails into Reverie son, sin dudas, los combates. El título toma como base lo experimentado en Trails of Cold Steel IV y todos sus elementos pero añade algo que era totalmente necesario: un mejor balance.

El jugador sigue teniendo acceso a una plétora de mecánicas como los Arts, la magia en el universo Trails; Crafts, poderosas habilidades innatas de cada personaje; una miríada de objetos con efectos beneficiosos, el desplazamiento táctico por la zona de combate; cambio inmediato para reemplazar a alguno de los cuatro miembros de la party por personajes de la reserva, los visualmente hermosos y devastadores S-Crafts, habilidades definitivas de cada miembro de la party; Brave Orders, comando que dota a los luchadores de un buff o característica especial como aumento de daño o reducción de daño recibido y los Combat Links, con los que dos personajes se unen al golpear un punto débil del enemigo para realizar un ataque extra y ganar un Brave Point (BP), golpear múltiples veces a los oponentes gastando 2 BP o realizando un ‘All-Out Attack’ contra todos los enemigos a costa de 5 BP.

Además, se añade una nueva opción llamada United Front, con la que el jugador puede gastar puntos del medidor de asalto -el mismo que permite iniciar batallas con ventaja contra los enemigos- para que todos los personajes realicen un ataque combinado, incluyendo a los de la reserva. Esto brinda 3 opciones: sanar a todos los personajes y aumentar su defensa, combinar los Arts de todos para lanzar un potente ataque mágico que recarga la barra de EP y aumentar el ataque especial y una carga contra los adversarios con todos los personajes para recargar las barras de CP y aumentar el ataque físico.

Sí, existen tantas opciones con efectos sobrepotenciados que el combate puede aparentar estar roto, pero Trails into Reverie mejora el balance en la dificultad de las anteriores entregas dotando a los enemigos de herramientas capaces de aniquilar a toda la party si no nos preparamos correctamente. Además, en esta entrega, los Brave Orders no evolucionan a las pocas horas de juego para quitarle todo el desafío a la experiencia, tal como ocurría en Trails of Cold Steel IV. De todos modos, es recomendable iniciar la aventura en “difícil” si el reto no es suficiente.

Fuera de las batallas, el jugador puede configurar cada personaje con armas, armaduras, accesorios y Quartz, gemas que mejoran ciertos atributos, enseñan nuevos Arts o dotan de habilidades únicas a sus portadores. Con 51 personajes jugables y más de una centena de Quartz disponibles, las opciones de personalización son interminables y eso es lo atractivo de este título. Si bien ciertos miembros de la party poseen stats innatos que los vuelven mejores para ciertos roles, se pueden configurar para que cada uno cumpla el rol que el jugador desee. A pesar de que la cantidad de personajes puede abrumar al jugador como en Cold Steel IV, esto se puede pasar por alto en esta ocasión ya que el juego dosifica la cantidad de miembros de la party durante la campaña y por una característica que convierte a Trails into Reverie en el “All Stars” de la saga.

Durante la aventura, el juego introduce el True Reverie Corridor, una mazmorra procedural que el jugador deberá recorrer para desbloquear más secciones venciendo a poderosos enemigos con los 51 personajes jugables disponibles. Si bien aparenta ser una simple forma de entrenar a la party para los rivales más complicados de la campaña, oculta un misterio a resolver con un enorme peso para el futuro de la franquicia y hasta un final alternativo o “verdadero”.

RELACIONADO: THE LEGEND OF HEROES: TRAILS INTO REVERIE PRESENTA UN NUEVO VIDEO DEDICADO A SUS PERSONAJES

Además de ofrecernos la posibilidad de armar equipos de ensueño a los fans de la franquicia, el True Reverie Corridor trae mucho contenido adicional. Mediante unos orbes llamados Sealing Stones que se obtienen al vencer enemigos formidables, se pueden desbloquear una plétora de objetos, cosméticos, accesorios, minijuegos, personajes que no se unen a la party por medio de la historia y los Daydreams usando un sistema ‘gacha’ (que no requiere de dinero real y que desbloquea todo eventualmente). Estos últimos son mini capítulos en los que se narran eventos previos a la campaña o tramas alternativas que refuerzan la identidad y desarrollo de ciertos personajes.

La jugabilidad de Trails into Reverie sigue demostrando porque un gran sector de los entusiastas de los RPGs aún consideran que se puede seguir experimentando con el combate por turnos para hacerlo más complejo o para ofrecer experiencias distintas. Es la cumbre de todo el trabajo que la compañía viene haciendo desde Trails of Cold Steel III y por supuesto que es el que mejor aplica la fórmula hasta la fecha.

Una mejora bien recibida

Curiosamente, hay algo que señalar en el siempre correcto más no excelente apartado gráfico de la serie Trails con esta entrega. Nihon Falcom viene usando el PhyreEngine de Sony para desarrollar sus títulos desde el primer Trails of Cold Steel en 2013. No obstante, la compañía decidió desarrollar su propio motor gráfico para comenzar a usarlo desde Kuro no Kiseki, secuela de Trails into Reverie, y si bien este título aún usa PhyreEngine, Falcom añadió una modificación importante basada en su proyecto que lo convierte en el que mejor se ve de toda la saga hasta ahora (al menos de los juegos de la empresa que están disponibles en Occidente).

Si bien los modelados 3D para los personajes y NPCs son los mismos y los assets para los escenarios se siguen viendo similares, lo que ha recibido una actualización más que apreciada son las cinemáticas. Durante la aventura, se pueden apreciar secuencias en los que el juego de cámaras y la animación de los personajes mejora radicalmente gracias a la tecnología de Motion-Capture añadida para esta entrega.

Gracias a esto, las expresiones faciales de los personajes, sus movimientos corporales y hasta la cinematografía de las escenas provocan que el título se vea menos obsoleto. Es evidente que no se puede comparar a superproducciones de empresas como Square-Enix o hasta de la misma Atlus, pero es un notable intento por mejorar un apartado que lleva siendo el talón de Aquiles de la franquicia desde hace 10 años.

Tiempos que no volverán

Para finalizar, es imposible no hablar de la banda sonora de un videojuego de Nihon Falcom y Trails into Reverie no es la excepción. Con el dolor del corazón de quien escribe estas palabras, Trails into Reverie tiene la banda sonora menos inspirada de la compañía en casi dos décadas. Para este título, Falcom Team Sound jdk estaba conformado por Hayato Sonoda, Takahiro Unisuga y el recién llegado Shuntaro Koguchi; con Yukihiro Jindo y Mitsuo Singa como subcontratados para apoyar con sus composiciones.

El problema es que si bien Trails of Cold Steel IV reducía mucho la participación de Takahiro Unisuga, probablemente el mejor compositor en la historia de Nihon Falcom, Trails into Reverie lo hace aún más y le brinda un protagonismo excesivo a Mitsuo Singa. Ojo, no todo lo que produce este compositor es malo ya que cuenta con canciones como Section G.F.S II, Sword of Swords, Breeding Innumerable Arms, Golden Fever y la sorpresiva Furious! Destroy! Mishneider!!, pero el resto de temas no están a la altura de un videojuego de Nihon Falcom y menos aún con la calidad de Trails into Reverie.

Esto es una lástima ya que hay varios temas que podrían ser mucho más satisfactorios con una instrumentación más pulida como Aim a Gun at a Bullet, The Road to All-Out War, Flash Your Fighting Spirit, Be Caught Up! o Elegant Prowess, A Piece of Light, No End No World -Instrumental-, Twilight Hermitage, Emergency Order y Bad Dream Invasion, pero por desgracia no suenan particularmente bien. Además, el hecho de que ciertos temas no son usados en el contexto adecuado o que otros se utilizan demasiado no hace más que perjudicar la experiencia sonora.

Por fortuna, Trails into Reverie aún mantiene canciones memorables de alta calidad capaces de competir con las bandas sonoras de sus predecesores. Tenemos a The Sunset We Always Look, Crossbell Nostalgia, Lapis, Glittering Mirage, Infinity Rage, Purgatory Scream, Stake Everything Strategy, Invisible Hand in the Shadow, Crime Punishment and Deceit, Maliciousness in the Mirror, Zero Encounter, Heavy Violent Match (con una tremenda referencia a Masquerade of Lies de Trails in the Sky The 3rd), Kiseki’s Journey, Reverse Babel, The Perfect Steel of ZERO, Hide and Seek by Myself (Unisuga se hace extrañar aún más con este tema) y los tres temas de batalla normal para cada ruta: Stand up Again and Again! para Lloyd, Wind-Up Yesterday para ‘C’ y Like a Whirlwind para Rean.

RELACIONADO: THE LEGEND OF HEROES: TRAILS INTO REVERIE LUCE MECÁNICAS EN NUEVO VIDEO

Un reconocimiento especial para Shuntaro Koguchi ya que realizó una labor más que destacada en su primer juego con Nihon Falcom, produciendo auténticas joyas que demostraron todo su potencial.

En conclusión, para responder la pregunta con la que se inició este análisis: Sí, Trails into Reverie es un cierre satisfactorio para los arcos de Crossbell, Erebonia y para la primera mitad de la saga. Si bien la historia puede pecar de volver a contar eventos que brillaron en anteriores entregas, las notables mejoras en el ritmo de la narrativa, el uso pleno de su asombroso elenco, el refinamiento de una jugabilidad diseñada con maestría y hasta un apartado gráfico actualizado lo convierten en una obra que se queda por muy poco de codearse con los mejores de su franquicia.

Pero, sobre todo, lo que Trails into Reverie consigue con total éxito es generar el suficiente interés como para que los fans estén emocionados por el siguiente gran arco de la historia. Con los previos lanzamientos de Trails from Zero y Trails to Azure, Nihon Falcom y Nis America deben estar preparándose para la eventual llegada de Kuro no Kiseki a esta parte del mundo y, como fan entusiasta de esta excelsa saga de RPGs, no podría estar más satisfecho.

Esta reseña fue escrita luego de jugar una copia digital de The Legend of Heroes: Trails into Reverie brindada por NIS America para PlayStation 5. El juego estará disponible en PC, PlayStation 4, PlayStation 5 y Nintendo Switch este 7 de julio del 2023.