Capcom ha sido una fuerza dominante en el mundo de los juegos de pelea en 2D durante más de tres décadas, y pocas compañías celebran su legado de manera tan impresionante como ellos. Si bien SEGA y SNK también rinden homenaje a su historia, Capcom logra destacar gracias al nivel de detalle y dedicación que pone en sus colecciones, como quedó claro recientemente con Marvel vs. Capcom Arcade Classics Collection. La primera Capcom Fighting Collection, aunque bien recibida, se enfocó sobre todo en Darkstalkers y en Street Fighter, lo que resultó en una selección de juegos que, pese a la inclusión de Super Puzzle Fighter II y Gem Fighters, se sentía algo monótona por su énfasis en peleas 2D. En contraste, Capcom Fighting Collection 2 ofrece una muestra más diversa de los mejores trabajos de Capcom en los últimos 25 años.
Esta nueva antología amplía el abanico de estilos de juego, integrando no solo los dos Capcom vs. SNK, sino también ambos Power Stone, Plasma Sword, Capcom Fighting Evolution y Street Fighter Alpha 3 Upper. Este último aparece por primera vez en una colección, tras haber sido exclusivo del hardware NAOMI de SEGA, y presenta mejoras de balance y correcciones de errores respecto a sus versiones anteriores de arcade. Además, incluye todos los personajes de las ediciones caseras, posicionándose como la versión Alpha 3 más completa enfocada puramente en el combate. Es una lástima que no se haya incluido el modo World Tour, aunque tiene sentido dado el enfoque en material de arcade.
La presencia de ambos Capcom vs. SNK refuerza la sensación de estar ante una recopilación que captura de forma casi perfecta la colaboración entre Capcom y SNK a finales de los 90 e inicios de los 2000. Mientras Mortal Kombat contrastaba con Street Fighter II en cuanto a estilo, SNK —a través de franquicias como Fatal Fury y The King of Fighters— se consolidó como su competencia más fuerte en calidad. Esta colaboración entre Capcom y SNK marcó un capítulo memorable en la historia de los videojuegos, que se tradujo en dos entregas de Capcom vs. SNK, un juego de cartas para Neo-Geo Pocket Color y un SNK vs. Capcom desarrollado por SNK.





A comienzos de los años 90, los beat ‘em ups como Double Dragon y TMNT dominaban el panorama, pero el crecimiento explosivo de los juegos de pelea fue impulsado en gran medida por la feroz competencia entre Capcom y SNK. A diferencia de la competencia entre Sonic y Mario, Capcom y SNK compartían estilos de juego que hacían que un cruce entre sus universos pareciera inevitable. Capcom vs. SNK de 2000 recibió varias versiones, y ahora la edición Pro debuta fuera de los arcades, recordándonos el impacto que tuvo su lanzamiento hace 25 años. Esta edición sumó a Dan Hibiki y Joe Higashi al elenco, mantuvo los dos estilos de combate —uno más cercano a Capcom y otro a KOF— y presentó un innovador sistema de ratios, permitiendo estrategias flexibles ya sea con equipos completos o personajes individuales poderosos.
La secuela, lanzada tiempo después, incorporó cuatro estilos de combate adicionales y realizó varios ajustes en la jugabilidad, recibiendo con los años versiones que adaptaron su experiencia más hacia el público de consolas. En su momento, una de las novedades en consolas fue el modo Easy Operation (EO), que permitía ejecutar movimientos especiales y súper ataques usando el stick analógico derecho. Aunque en su lanzamiento fue muy criticado por hacer el juego demasiado sencillo, hoy en 2025 se entiende mejor como una propuesta de accesibilidad adelantada a su época, ideal para facilitar combates vistosos de forma casual. Ambas ediciones, la original y la EO, están disponibles —aunque la versión EO no figura directamente en el menú principal. Para acceder a ella, debes seleccionar el juego, presionar el botón cuadrado en PlayStation para entrar al submenú y ahí elegir la versión EO, ofreciendo una experiencia de juego única incluso comparada con títulos actuales. Es asombroso lo visionario que resultó este modo, y que siga disponible es valioso para preservar su legado.
Por el lado de los juegos de peleas poligonales, la colección también ofrece una selección sólida, incluyendo las dos entregas de Power Stone, además de Plasma Sword y Project Justice —continuaciones de Star Gladiator y Rival Schools, respectivamente—, aunque resulta curioso que los juegos originales no estén presentes ni aquí ni en otras compilaciones de Capcom. Esto, sin embargo, permite enfocarse en títulos más recientes visualmente, que teóricamente envejecen mejor para los nuevos jugadores. Star Gladiator fue pionero como juego de lucha con armas, ofreciendo un ritmo turbo poco común para los peleadores 3D de la época, con una ambientación de ciencia ficción y una de las mejores bandas sonoras de Capcom.





La presencia de estos títulos poligonales refuerza la sensación de que esta colección es también un homenaje a Dreamcast, especialmente gracias a Project Justice, que expandió la fórmula de “Street Fighter poligonal en un colegio” con jugabilidad más refinada y gráficos considerablemente mejorados respecto a Rival Schools. Power Stone 2 llevó aún más allá el frenesí del primer juego, logrando que, gracias a su ritmo vertiginoso, siga resultando entretenido incluso en la actualidad, sin que la acción decaiga a pesar del caos en pantalla.
Además, se siente que Power Stone habría tenido aún más éxito si se hubiese lanzado en tiempos actuales, ya que su estilo visual —similar al de One Piece, con expresiones faciales exageradas y animaciones muy marcadas— encaja perfecto con los estándares modernos, donde los escenarios tienden a alejar la cámara. Quizá esta colección le dé nueva vida a la franquicia; no sería raro que, si logra captar atención en redes sociales, veamos una edición física que incluya la serie animada o, al menos, el lanzamiento de nuevo merchandising.
Capcom Fighting Collection 2 llegará a todas las consolas y PC vía Steam este 16 de mayo, siguiendo el modelo exitoso de las compilaciones anteriores de Capcom. Los juegos están replicados de forma fiel a sus versiones arcade, pero además se ofrecen más variantes de lo habitual y completas funciones de museo. Aquellos que crecieron con Capcom en sus consolas o en los arcades hace 25 años encontrarán mucho para disfrutar, así como también los nuevos fans que llegaron a la saga gracias al éxito de Street Fighter V y Street Fighter 6, ya que se puede trazar un hilo claro entre lo experimental que fue Capcom en esa época y los riesgos que ha asumido en la última década.