Estos últimos días he tenido la suerte de poder estar inmerso en Dicefolk, un título con una propuesta interesante que escapa al tradicional roguelike, sin dejar de lado los elementos que lo hacen formar parte de ese género, y que con su jugabilidad ha logrado mantenerme atrapado más horas de las que hubiera imaginado. Así que, ¡vamos a desmenuzar nuestra experiencia!
Dicefolk es un roguelike en el que tendrás que armar un equipo con unas criaturas llamadas quimeras, y en donde cada acción se elige no de una lista de ataques o movimientos, sino de dados que son lanzados al azar en cada turno, lo interesante aquí es que tú tienes la capacidad de decidir los movimientos enemigos de los dados que les hayan tocado, lo cual puede parecer hacer la cosa fácil, pero que en realidad le agrega una capa de estrategia más que en ocasiones resulta en una toma de decisiones más compleja.
El juego nos narra la historia de los Dicefolk, un grupo de gente que tiene el poder de doblegar la voluntad de todos los seres vivos con unos dados mágicos. Entre ellos se encuentra la protagonista, Alea, quien utilizará estas habilidades para hacer que las quimeras peleen a su lado; pues un hechicero llamado Salem ha llevado a la humanidad al borde la extinción haciendo que estas criaturas se enfrenten a los humanos; y ahora Alea buscará liberar a su gente de Salem, haciendo uso de sus poderes y con ayuda de estas simpáticas quimeras.
La historia suena bastante simple para ser francos, y la verdad es que nunca va mucho más allá de esa premisa, aunque expande un poco su universo en los archivos del compendio. Básicamente tu objetivo será derrotar a Salem con tu grupo de quimeras, lo cual eventualmente tendrás la oportunidad de hacer, pero que realmente se siente como cualquier otro enfrentamiento más, solo que con una criatura más poderosa.
Y es que entre varios roguelikes donde su historia se amarra de la jugabilidad mostrándonos una trama más interesante, Dicefolk se siente demasiado simple, dando la sensación de que la trama es solo una excusa para explicar porque tu personaje va de un lado a otro y utiliza a las quimeras. De igual forma, no es para darle muchas vueltas, pues el fuerte del juego no está aquí.
Ahora, vayamos por los aspectos que saltan a la vista. Dicefolk tiene un apartado gráfico simpático y colorido, con un diseño de criaturas bastante variado, que en líneas generales tratan de reflejar los tipos de ataque o particularidades que tienen. Eso sí, las animaciones de combate son bastante simples, donde toda la criatura se mueve como si embistiera al enemigo.
La banda sonora a su vez es bastante cumplidora, dándole el toque épico a cada combate, pero tampoco vas a encontrar alguna melodía que se quede grabada en tu mente. Lo bueno es que funciona bien para el juego, haciendo más emocionantes los enfrentamientos.
Habiendo sacado ello de lado, viene lo bueno, y es que el apartado en el que Dicefolk destaca es en su jugabilidad, la cual puede llegar a tener tantas variables y elementos, y que son tan bien manejados que no se sienten abrumadores, aunque si puedes andar un poco perdido en un inicio.
Para empezar, antes de cada recorrido debes escoger un tipo de talismán, el cual variará el grupo de criaturas iniciales con que cuentas, así como las quimeras que te aparecerán a lo largo del mismo. Lo divertido es que no tienes todos los talismanes disponibles desde un inicio, sino que deberás desbloquearlos avanzando lo máximo posible cada vez y culminando los diferentes niveles.
Lo interesante es que cada talismán tendrá una barra de progreso, la cual al llenarse descubrirá una nueva criatura que tendrás la opción de reclutar para tu equipo.
Asimismo, el talismán no solo influencia en las criaturas, sino también en cómo vas a jugar el set de criaturas que tengas, pues las habilidades e ítems que aparecerán cambiarán un poco entre uno y otro, con nuevas funciones o elementos característicos de cada uno.
En total son 4 talismanes principales, teniendo que liberar 3 de ellos para poder enfrentar a Salem, el boss final, quien luego de ser derrotado te dará acceso a un quinto talismán; y la verdad es que,si se siente la diferencia entre cada uno. Dándole un valor mayor a la rejugabilidad, pues te va a dar curiosidad ver cómo funcionan y las combinaciones que puedes lograr.
Ahora, una vez que entres al juego, luego de elegir el talismán, arrancarás con tres criaturas similares, con pequeñas variaciones en sus estadísticas. Con ellas irás al campo de batalla en el cual se desarrollará el juego y la verdad es que es bastante divertido.
En cada turno se lanzan tus dados y los del enemigo. Estos te permitirán diversas acciones como atacar, hacer un ataque con más daño, hacer un ataque violento que anulará tus siguientes movimientos, rotar de manera aleatoria, atacar de lejos, colocar un escudo de defensa, entre muchas otras cosas más; y si bien puedes pasar el turno y no utilizar todos tus dados, no sucede lo mismo con los dados del enemigo, pues estarás obligado en hacer uso de todos, a menos que alguno de ellos sea una inacción.
Esto le brinda un elemento interesante a Dicefolk, ya que no solo estarás pensando en el orden de tus movimientos, sino también en el orden de uso de los dados enemigos para evitar que alguno de ellos termine perjudicando a tu equipo, y la verdad es que hay momentos donde te verás obligado a darle una buena pensada, pues va a suceder que alguno de los dados enemigos termine castigándote más de lo esperado.
Esto le brinda un elemento novedoso al título y de hecho se siente bastante divertido, sobre todo cuando enfrentes a quimeras más poderosas y jefes de nivel, ya que ellos tendrán dados especiales con movimiento únicos, que harán el reto más difícil.
Estos enfrentamientos los tendrás a lo largo de 3 biomas, a excepción de cuando te enfrentes a Salem, que liberará un cuarto bioma propio de él. Los biomas son básicamente los mundos o niveles que deberás culminar antes de pasar al siguiente. Además, en cada bioma encontrarás enemigos diversos, tiendas, personajes, que te ayudarán en tu aventura, así como un enfrentamiento de élite, y el jefe final del bioma/nivel.
Lo bueno es que el juego no te obliga a limpiar todo el bioma para pasar al siguiente, para lo cual solamente tendrás que vencer al jefe final. Sin embargo, gracias a la manera en que está diseñado el título, vas a querer, y te va a convenir, limpiar completamente todo, pues encontrarás una serie de regalos y hasta tendrás la opción de reclutar quimeras, por lo que te encontrarás haciendo un barrido total constantemente.
Como todo buen roguelike esto tiene su riesgo y beneficio, pues curar a las quimeras no es tan fácil y la salud queda acumulada hasta que pasas de bioma, lo que significa que si antes del jefe final tu equipo queda muy dañado y no puedes curarlo, vas a complicar ese enfrentamiento de sobre manera.
De igual forma, hay algunas formas de aliviar esto, y es que en tiendas, restos, y NPCs podrás encontrar ítems que se asignan a tus quimeras para darles habilidades nuevas o mejorar sus estadísticas; o puntos de habilidad que se asignarán de manera aleatoria, y hasta ítems que podrás utilizar dentro del combate como curar a tu equipo por 50% de su vida, añadir un dado, atacar a todos los enemigos, etc.
Debo hacer un paréntesis para hablar de una de las tiendas y es que también hay un forjador de dados, quien te permitirá comprar caras de dados para que al lanzarlos tengas más probabilidades de que salga algo que te convenga, o cambiar las caras que menos te ayudan; pero, por qué hago mención especial, es porque estas variaciones cambian completamente la manera en como jugarás, ya que tu mismo puedes alterar las probabilidades de obtener una buena tirada de dados.
Asimismo, quiero detenerme brevemente en los ítems que puedes equipar, y es que las quimeras suelen aparecer con un solo espacio para esto, por lo que o reclutas quimeras más poderosas con mejores stats y más espacios, o cumples ciertos retos para hacerlo. De hecho, la mayoría de estos retos vienen en la forma de ítems con condiciones particulares. Por ejemplo, deberás equipar un ítem que no te permitirá atacar hasta ser golpeado durante una partida, luego de lo cual te otorgará un espacio más o un buff importante.
Lo genial es que hay varios de estos ítems con condiciones que te hacen querer arriesgarte para lograr obtener el premio que ofrecen, aunque si eliges o calculas mal, te pueden llevar a la ruina; ya que como todo rogulike, en cuanto pierdas, regresarás al punto cero, teniendo que elegir nuevamente tu talismán.
Antes que lo olvide, los biomas tienen un elemento de aleatoriedad que hace que cada recorrido sea diferente, ya que la posición de ubicación de los enemigos, tiendas, NPCs y demás cambia.
Otro toque interesante es que a medida que avances, reclutar quimeras es una buen opción para reforzar a tu equipo o cambiar una quimera muy dañada, aunque si la has buffeado, sentirás reparos de hacerlo para no perder sus estadísticas.
Ah, y antes que lo olvide, al mejor toque Pokémon, también tendrás quimeras Shiny, por decirlo de alguna manera, que son quimeras que cambian el color original y que suelen ser más poderosas ya que sus habilidades son mejores. En todo mi recorrido solo he logrado obtener dos, las cuales me han hecho la vida mucho más fácil.
Con todo lo dicho, aquí viene la genialidad del título, y sucede que cuando vayas consiguiendo items, reclutando quimeras, avanzando en los biomas, modificando tus dados, te vas a percatar que el hacer sinergia entre los miembros de tu equipo, y las demás variables, es endiabladamente divertido, pues la cantidad de opciones que tienes a disposición, con las diferentes habilidades de las quimeras y dados que puedes tener, abren el abanico de una manera exponencial a poder cambiar de estrategia en cada recorrido que hagas. Lo mejor de todo es que se siente bien balanceado como para impedir que formes un equipo tan malo, que sus probabilidades de éxito sean terribles.
Es así como te vas a encontrar una y otra vez haciendo recorridos diversos para lograr armar diferentes equipos probando ítems, habilidades y cualquier otro modificador distinto para ver si la estrategia resulta eficaz y así culminar todos los biomas.
Asimismo, el juego tiene una buena progresión por lo que cuando encuentres una nueva quimera no se sentirá muy débil o abusiva, al igual que los diferentes ítems y enemigos que vayas encontrando, haciendo que cada recorrido fluya bastante bien.
Dicefolk es un juego bastante divertido y que te va a mantener atrapado en ese bucle de hacer nuevos recorridos tratando de superar los niveles, probando combinaciones diferentes de quimeras, ítems, habilidades, dados, etc; y eso lo hace bastante bien, ya que el componente de rejugabilidad es alto; y si eso no es suficiente, tienes la chance de jugar algunos retos que insertan variaciones a las reglas generales para hacer más complicado y divertido todo. Los combates son retadores en algunos momentos, y el ritmo se siente bastante bien como para ir tanteando tu nuevo equipo y llegar preparado para los momentos más duros, los cuales se volverán un verdadero acertijo donde tendrás que razonar y calcular tus posibilidades con cada lanzamiento de dados para tratar de obtener el mejor resultado posible y superarlos satisfactoriamente.
Esta reseña fue escrita luego de jugar una copia digital de Dicefolk brindada por Devolver Digital para PC.
PUNTOS BUENOS
La progresión está muy bien lograda. Se vuelve adictivo con cada pasada. La sensación de logro cuando consigues un equipo con buena sinergia. Las diferentes opciones en el combate. Quimeras shiny. Rejugabilidad.PUNTOS MALOS
Se siente tedioso desbloquear a las quimeras ya que al final su rotación es aleatoria. Algunas quimeras se sienten inútiles. Al inicio te puedes perder un poco. La historia no suma nada .CONCLUSIÓN
Dicefolk es un juego que se vuelve adictivo con cada pasada. Tratar de encontrar el equipo de quimeras, items, stats, perfecto, o con una gran sinergia te va a mantener pegado al juego por un buen rato. Así que si eres amante de los roguelite este tiene bastantes elementos novedosos y atractivos como para que no lo dejes pasar por alto.